La insistencia de Carmen Moriyón en el Vial de Jove soterrado: ¿convicción o enfrentamiento?

La insistencia de Carmen Moriyón en el Vial de Jove soterrado: ¿convicción o enfrentamiento?  

En el escenario político de Gijón, el Vial de Jove se ha convertido en uno de los temas más controvertidos de los últimos meses. En el centro de la polémica está Carmen Moriyón, alcaldesa de la ciudad, quien ha insistido vehementemente en que la solución para el tráfico pesado en la zona pasa por un soterramiento, a pesar de que el Gobierno del Principado ya ha presentado una alternativa que parece satisfacer las principales demandas vecinales.  

El debate no se reduce a una cuestión técnica o económica, sino que parece girar en torno a un enfrentamiento político y de narrativa. Mientras que la propuesta del Principado elimina la circulación de vehículos pesados por el casco urbano —una de las reivindicaciones históricas de los vecinos— y plantea una remodelación del entorno con un enfoque verde y peatonal, Moriyón mantiene su postura a favor del soterramiento, pese a los elevados costes y la complejidad técnica que implica esta solución.  

¿Estrategia política o preocupación ciudadana?  

Muchos se preguntan si la insistencia de la alcaldesa responde realmente a una convicción sobre el mejoramiento de la calidad de vida de los gijoneses o si, por el contrario, es una estrategia para posicionarse en oposición al Gobierno del Principado, gobernado por otro signo político. No sería la primera vez que un debate urbanístico se convierte en el escenario de una pugna partidista, alejándose del interés colectivo.  

El Gobierno del Principado ha defendido que su proyecto no solo responde a las necesidades inmediatas de movilidad y seguridad, sino que también está alineado con la sostenibilidad y el desarrollo urbano responsable. La remodelación propuesta incluye espacios verdes, la peatonalización de tramos clave y soluciones efectivas para redirigir el tráfico pesado hacia rutas alternativas, sin necesidad de un soterramiento que incrementaría los plazos y los presupuestos de manera significativa.

El coste de la confrontación  

El enfrentamiento entre administraciones tiene un coste evidente: el tiempo. Mientras se prolonga la discusión, las soluciones definitivas para los vecinos de Jove siguen sin materializarse. Además, la percepción de un posible empecinamiento político puede alejar la atención de los aspectos técnicos y reales del problema.  

La clave del conflicto radica en una pregunta central: ¿es el soterramiento una necesidad imperiosa o una forma de marcar distancia política? Aunque Moriyón ha defendido su postura como la única que garantiza una solución integral y duradera, las alternativas propuestas por el Principado demuestran que existen otras vías para alcanzar los objetivos.  

El futuro del Vial de Jove

Lo que está en juego no es solo la movilidad en Gijón, sino también la credibilidad de las instituciones y su capacidad para poner los intereses ciudadanos por encima de las disputas partidistas. La insistencia en el soterramiento, pese a las soluciones ya sobre la mesa, plantea dudas legítimas sobre si la prioridad es resolver un problema urbano o simplemente llevar la contraria.  

En última instancia, los vecinos y vecinas de Jove merecen una respuesta eficiente, sostenible y consensuada. Más allá de los debates políticos, lo que realmente importa es que las soluciones lleguen pronto y mejoren de forma tangible la calidad de vida de quienes han esperado durante años una mejora en su entorno.