Ética y Política en Asturias: La "Política del Duernu" y los "Arrimaos"
Ética y Política en Asturias: La "Política del Duernu" y los "Arrimaos".
La política asturiana, como reflejo de la sociedad, ha generado términos y conceptos que no solo definen comportamientos específicos, sino que también revelan las tensiones éticas de su tiempo. Dos expresiones especialmente significativas, "política del duernu" y "arrimaos", encapsulan actitudes y prácticas políticas que han marcado la gestión pública en la región.
La "Política del Duernu": Improvisación y Clientelismo.
La "política del duernu", acuñada por el economista y académico asturiano Juan Velarde Fuertes, señala una práctica política basada en el reparto desordenado y clientelista de recursos públicos. El término "duernu" hace referencia a un recipiente de madera tradicional asturiano, usado para repartir alimentos, y en este contexto, simboliza el reparto improvisado y arbitrario de fondos públicos.
En un ámbito ideal, los recursos de la administración deberían gestionarse con una visión estratégica, orientada al desarrollo sostenible y equitativo de toda la región. Sin embargo, este término denuncia una realidad donde los intereses localistas o clientelistas se imponen a las prioridades comunes, favoreciendo a unos pocos a costa del bienestar general. La "política del duernu" es, por tanto, un recordatorio de los peligros éticos de desviar la acción política de su fin último: el servicio al bien común.
Esta práctica perpetúa desigualdades, socava la confianza ciudadana en las instituciones y condena a Asturias a un modelo de gestión reactivo, carente de proyección a largo plazo. Desde una perspectiva ética, resulta inaceptable que las decisiones públicas se guíen más por favores políticos que por principios de justicia social y desarrollo colectivo.
Los "Arrimaos": La Pérdida de la Autonomía Política.
El término "arrimaos" surge del lenguaje popular asturiano y describe a aquellos políticos o colectivos que, careciendo de un proyecto propio sólido, se alinean estratégicamente con fuerzas dominantes o grupos de poder para obtener beneficios personales o partidistas. En un contexto político donde la autenticidad y la coherencia ideológica deberían ser valores fundamentales, los "arrimaos" representan una renuncia a la independencia y al compromiso ético.
El oportunismo de los "arrimaos" no solo refleja una crisis de identidad política, sino también una falta de respeto hacia el electorado, que confía en líderes capaces de defender sus intereses con convicción. En lugar de trabajar por un modelo de sociedad basado en principios y objetivos claros, estas prácticas priorizan la supervivencia política por encima de los ideales, perpetuando una política superficial, interesada y vacía de valores.
Un Llamado a la Ética en la Política Asturiana.
La crítica a la "política del duernu" y a los "arrimaos" no debe quedarse en una simple denuncia de prácticas inadecuadas. Es, ante todo, un llamado urgente a repensar la política desde una perspectiva ética. La política es, en esencia, una herramienta al servicio del bien común, y cualquier desviación hacia el clientelismo o el oportunismo supone una traición a este principio fundamental.
Asturias necesita líderes capaces de anteponer los intereses colectivos a los individuales, que gestionen los recursos públicos con responsabilidad, transparencia y una visión de futuro. Superar la "política del duernu" y combatir el fenómeno de los "arrimaos" implica exigir no solo un cambio de prácticas, sino también un cambio de mentalidad que reivindique la ética como el pilar de toda acción política.
Solo a través de este compromiso ético podrá la política asturiana recuperar la confianza ciudadana y convertirse en un verdadero motor de progreso social. En última instancia, el desafío no es solo político, sino moral: construir una sociedad más justa, solidaria y consciente de que el bienestar colectivo es el único objetivo legítimo de la acción pública.
Resumen de terminología:
1. “Política del Duernu”: Concepto acuñado por Juan Velarde Fuertes que critica el reparto clientelista y desordenado de recursos públicos en Asturias, simbolizado por el "duernu", un recipiente tradicional. Denota improvisación y localismo en la gestión política.
2. “Arrimaos”: Término popular asturiano que describe a políticos o colectivos que se alinean con fuerzas dominantes para beneficio propio, mostrando falta de autonomía e identidad política.